Encontré este video, realmente muy gráfico de como a veces no comprendemos a nuestros padres quienes son simple y extraordinariamente nuestros padres. Ahora que tengo dos hijos puedo entender que aún a pesar de todos mis esfuerzos, nunca podré ser el padre perfecto, sin embargo puedo ser un padre amoroso.
Es una pena que ahora los conceptos sean tan mediáticos que la imagen de papá sea tan plástica, tan de catálogo y tan «customizable» al gusto de los hijos, que los padres han abdicado su responsabilidad y su posición para convertirse en simples obsevadores y proveedores de bienes y servicios. Claro que también hay padres que no asumen este rol y escogen llenar su agenda con cualquier otra cosa muy importante y no invierten su vida en sus hijos.
La misión de un padre traciende la procreación, la verdadera misión de un padre es proveer verdadera vida a sus hijos.
El modelo más grande de paternidad lo encontramos en Dios, quien lo dio todo por amor a nosotros, no para que pensemos bien de Él, sino para que pensemos bien y para que tengamos la opción de vivir el tipo de vida que Él ha soñado y preparado para nosotros.